jueves, 12 de diciembre de 2013

Finde en Boston

 
Por fin llegó el fin de semana de mi viaje a Boston (habíamos comprado los billetes hacía un mes). Nuestro avión despegaba el viernes a las 18:45 así que me cambiaron el horario y a las 17:00 Charlie me llevó al aeropuerto. Pobre, me dio un poco de pena porque justo ese fin de semana Teah se fue de viaje de trabajo y se quedaba él solo son los trillizos.
Al viaje fuimos Marta, David (que ya lo mencioné una vez creo, es el chico francés que conocí en mi meeting), Jason (otro chico francés amigo de David) y se unió una amiga de Marta (que está de au pair en Connecticut) que se llama Sara.

Llegamos a las 9 de la noche a Boston y nada más salir del aeropuerto el tiempo ya nos avisó de que iba a ser un poco fastidiado: llovía y granizaba sin parar. Los días antes todo el mundo me decía que estábamos locos de visitar Boston en invierno que la nieve poco menos nos llegaría por la cabeza y que nos congelaríamos de frío. La primera parte para nada, no había nada nevado ni nevó en todo el fin de semana (aunque en el móvil ponía que si lo haría) pero la segunda acertaron de pleno. Que horror!! Hacía mucho tiempo que no pasaba tanto frío y eso que iba preparada con la cazadora de la nieve. Nada más poner un pie en la calle las orejas se me convirtieron en estalactitas, menos mal que el día anterior me había comprado un gorrito porque con el pelo corto noté todavía más frío en la cabeza. De verdad que casi me quedo helada, en los primeros cinco minutos de mi estancia ya me arrepentí de haber dicho que me gustaban los viajes de invierno.

Bueno, el caso es que nos fuimos en busca del hostel y lo encontramos sin problemas. Se llama 40 Berkeley Hostel y, en general estaba muy bien. Tenía zona de leer con una estantería con libros, zona de sofás, billares, cine y lo que más me gustó a mí; carrito de palomitas gratis. Las habitaciones eran un poco chungas, cogimos una triple para las tres y una doble para los chicos pero para lo que era, simplemente dormir, yo me di con un canto en los dientes ya que dormí en sitios mucho peores. Además estaba muy bien situado, cerca del centro y de precio creo que fueron 70$ cada uno por las dos noches.

El viernes llegamos tarde y no podíamos ver nada, ya lo sabíamos porque la idea era volar el viernes aunque llegásemos tarde para dormir ya en Boston y así poder levantarnos pronto para empezar a visitar el sábado por la mañana temprano.
Decidimos coger el bus turístico para ahorrar tiempo y para no pasar tanto frío. A mi me encantan los buses turísticos porque te llevan a los sitios que tienes que ver aunque también me gusta mucho callejear las ciudades y patearlas de arriba a abajo. De echo, nunca había caminado tan poco en un viaje pero de verdad, que lo agradecí porque hubiera cogido una hipotermia.

Empezamos el tour viendo Harvard que la verdad, me decepcionó un poco. Me lo imaginaba muy diferente en plan con una entrada súper grande que pusiera Harvard en grande pero no. Es como que no es un edificio en concreto son como varias zonas extendidas pero igualmente muy bonito con mucha arboleda. Al ser fin de semana obviamente no había ambiente universitario aunque sí pudimos ver algunos estudiantes que andaban por allí con su sudadera granate de Harvard (que al final no me compré :( jooooo) a los que observábamos y comentábamos entre nosotros cuánto dinero tendrían para estar estudiando allí.
De la Estatua de Harvard, decir como curiosidad, que el zapato que Sara toca en la foto está así de desgastado porque los alumnos, cuando tienen un examen, pasan siempre a tocarlo para que le de suerte, nosotros por si acaso también lo tocamos!
 
Estatua de Harvard
 
A las puertas de Harvard
 

Luego nos fuimos al Public Garden que me encantó, un contraste súper llamativo de la arboleda del parque con los rascacielos detrás. Estaba lleno de ardillas correteando por todos lados, me encantan!
 
 

Después de visitar el Public Garden nos fuimos por la ciudad y nos llamó la atención que todo el mundo iba con algo de navidad vestido, así que preguntamos y nos contaron que era la Pub Crawl (exactamente a Bypas  th Annual Ugly Christmas Sweater Pub Crawl). Una celebración que se hace en las grandes ciudades una vez al año; es el tour de los bares que también se celebra en Europa. Aún era muy temprano, las 4 de la tarde pero como hacía tanto frío se hacía casi imposible estar en la calle así que nos unimos al tour! Yo estuve solo un par de horas porque no me encontraba bien, me olvidé de comentar que fui al viaje mala del estómago y la verdad que el sábado no lo disfruté mucho por culpa de eso pero el domingo ya estaba casi bien. Así que luego me uní a los chicos que no pudieron entrar en el bar porque uno es menor de edad y aquí son muy estrictos con eso. Te piden el carnet de identidad en la puerta de los bares aunque tengas 60 años y como se vende alcohol, da igual la hora que sea que si tienes menos de 21 te quedas fuera. Así que me fui con ellos a la tienda de Apple, centro comercial, a cenar, etc.


El domingo nos levantamos muy temprano para empezar a ver cosas, ya que era el último día y teníamos que aprovecharlo, la verdad que nos cundió bastante porque como el vuelo salía a las 19:00h tuvimos mucho tiempo para ver lo que nos faltaba.
Primero estuvimos en el Boston Common, un parque muy bonito para pasear y luego fuimos a Quincy Market, también muy chulo aunque tuvimos que entrar como burros sin mirar hacia los lados porque era todo comida riquísima.

Boston Common


Quincy Market


Después seguimos recorriendo la ciudad y paramos en el Estadio de los Celtics de Boston (el equipo de la NBA). En realidad comparte estadio también con el equipo de Hockey sobre hielo y dependiendo del partido que vaya a haber transforman la pista para una cosa u otra. En este caso, como el día anterior hubo partido de Hockey estaba la pista de hielo.

Continuamos nuestro viaje viendo el USS Constitution, que es uno de los primeros barcos de la Armada de los Estados Unidos. Al acabar, casi nos morimos de frío esperando el bus turístico que pasaba cada 20 minutos.

Casi ya terminando la tarde nos fuimos al Duck Harbor Splash, el típico bus que se convierte en barco y te lleva de ruta por el agua. El trayecto duró 45 minutos y, aunque al principio MArta y yo no estábamos muy convencidas de ir por el frío que teníamos, mereció la pena.
 

Y ya, para terminar dejando un buen sabor de boca, lo más bonito del viaje para mí: el Prudential Tower. Vistas de Boston desde la planta 52 de este rascacielos:
 
 

En general Boston, al contrario que Washington por ejemplo, no me pareció que sea una ciudad que tenga muchas cosas que visitar. Tampoco hubo nada que me llamara especialmente la atención. Sin embargo, en conjunto, me pareció una ciudad muy bonita y tranquila para vivir y mis hosts dicen que en primavera es todavía más bella.
 

 



 

 
 

 


 

 

 
 
 
 

 


 
 
 
 

 
 

 

 
 

2 comentarios:

  1. Como que el típico bar que se convierte en barco??? jajaja yo nunca he visto uno de esos!! que guau! Que buena pinta tiene el viaje...Pasasteis frío pero mereció la pena!! Suerte de los blogs, así veo ciudades de la costa este por que va a ser difícil viajar por esa zona! Pero no me puedo quejar jaja pronto yo también me voy de turisteo :D

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  2. jajaja bar no, bus! leíste mal no estaría mal un bar-barco jajaj pero no!
    Ahorrando un poco se puede viajar por cualquier lado :) Cuando quieras venirte por esta zona avisa!

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