lunes, 6 de enero de 2014

Navidades superadas!

Sí... ya puedo decir que he sobrevivido a unas Navidades aquí y lejos de mi familia.

Llegó el Día de Noche Buena y lo de pensar en que era un día normal para no tener morriña no funcionó. Ese día tenía que trabajar porque Teah tenía que ir al entierro de la prometida de su padre, que creo que dije en la anterior entrada que se había puesto enferma y Charlie tenía que pintar el basement. Así que me levanté a las 7:30 am con una mezcla entre pena, melancolía y mala leche por tener que trabajar ese día y por lo que me habían dicho el día anterior mis hosts. Resulta que el día antes de Noche Buena me dicen que la abuela sigue con lumbalgia y que no va a venir y que los amigos tampoco (estaba claro!) así que no iban a celebrar nada el 24, el 25 haríamos cena de Navidad. A mí me dio el bajón porque no celebrar Noche Buena no estaba en mis planes pero al final todo se enderezó un poco más y Viki nos invitó a pasar la Noche Buena a Anna y a mí en su casa, con su host family.

A mis hosts no les pareció bien que fuera a cenar a casa de otra familia, me dijeron que esperaban que pasara esa noche con ellos y los niños cocinando galletitas para Santa como me habían dicho. Así que tuvimos un "intercambio de opiniones" y le dije lo que pensaba y ella a mí de buenas maneras pero finalmente me fui.

En casa de Viki estuvimos bien aunque Anna y yo nos sentíamos fuerísima de lugar, fueron muy amables en invitarnos pero la verdad que no pintábamos nada. Así que cenamos (a las 6 de la tarde), vimos como los niños abrían los regalos de Noche Buena y cuando los mayores iban a abrirlos ya nos retiramos. Nos fuimos a casa de Anna y nos hicimos un smoothie de frutas casero y estuvimos hablando hasta que dieron las 22:30 y me fui a casa. Cuando llegué mis hosts estaban montando regalos para los niños, colocándolos debajo del árbol, etc. Estuve allí un rato con ellos hablando y luego me fui a la cama.

Al día siguiente habíamos quedado en desayunar juntos a las 8:30 pero a las 8 ya estaba despierta y súper nerviosa cual niña pequeña porque había venido Santa. Bajamos y los niños empezaron a abrir regalos. Había muchísimos así que abrieron unos pocos, hicimos pausa para desayunar y después continuaron. El desayuno de Navidad, suele ser típico aquí hacerlo a lo grande y qué mejor que jamón al horno, huevos revueltos, rodajas de tomate, fruta y pastelitos para empezar la mañana??
 

Acabado el desayuno seguimos abriendo regalos y como fui buena Santa también dejó regalos para mí pero lo que más ilusión me hizo fue que me dejara un stocking (calcetín navideño) lleno de cositas. Me regalaron: una camiseta, unos pendientes, un broche, un boli para el Ipad, cremas y jabones de Victoria Secret, barra de labios, caramelitos, bombones lindth y una tarjeta de 100$ para un salón de belleza con SPA. Los abuelos de Arizona me mandaron una sudadera de la Universidad de allí y la otra abuela y la tía un fulard y una vela aromática (no tengo foto de eso).

Por mi parte, acerté de pleno con mis regalos. A los niños les encantaron y juegan siempre con ellos y creo que a los padres también les gustaron mucho (ya sabéis, aquí la expresividad no es a la española).



Después de estar dos horas abriendo regalos... estuve haciendo Skype con mi familia y Rider y luego ellos se fueron al parque con los niños y yo fui a visitar a Anna que estaba enferma.
A las 6 me volví a casa para nuestra "Cena de Navidad" y la verdad que me lo pasé muy bien con ellos cocinando, hablando de un montón de cosas, etc. Además estaba todo muy rico, les encanta cocinar y me hace gracia (momento peli) que siempre sacan el libro de recetas familiar donde se pasan las recetas de generación en generación. Siempre, siempre cocinan con libro de recetas ya sea el familiar o comprado. Y para cocinar nada de "a ojo", aquí todo va por medidas, tienen medidores de todo tipo así como instrumentos de cocina para cada cosa, es una pasada! Contrasta un poco con la idea de que luego todo sea de cocina rápida y fácil preparación.


El día 28, no sé si expliqué en la otra entrada, celebraríamos las Navidades en Virginia con la familia de mi host mom. Sus padres están separados así que suelen hacer un gran desayuno navideño con su padre y un lunch-cena con la madre. Ellos me avisaron varias veces de que la vida de su familia en Virginia es muy diferente y que debía verlo yo misma. Yo pensé que exageraban hasta que llegamos allí.
Tanto el abuelo como la abuela viven en zonas muy apartadas donde no hay ni cobertura para el móvil y en casas muy pequeñas en plan "Esta casa era una ruina versión USA". Primero fuimos a casa del abuelo de los niños y había un montón de gente los cuales no mostraron ni el mínimo interés en que llegásemos. El abuelo, pobre, cocinando sin parar un gran desayuno para toda la familia y cuando fue la hora de empezar a comer cada uno cogió modo buffet su comida y se dirigió a una zona de la casa, todos excepto nosotros y los niños. Imaginaros mi cara, no daba crédito a lo que estaba pasando. Este es el desayuno navideño familiar?? Era todo muy extraño, muy diferente a lo que estoy acostumbrada tanto en España como con mi familia de aquí. Ya no solo por el nivel de vida social que se nota que es muy pero que muy inferior al de mis hosts, sino por detalles que veía que no eran normales.
Bueno después del súper desayuno "en familia" se pusieron a dar los regalos de Navidad, muy forzado también y luego estuvimos allí un rato y nos fuimos a casa de la abuela.
Casa del abuelo.

Desayuno "en familia".
Abriendo los regalos en casa del abuelo.

La abuela es la que yo ya conocía que me cae genial, nada más entrar por la puerta me dio una abrazo como si fuera una nieta más. Allí ya me sentí más cómoda y hable mucho con ellos. Pero de nuevo cosas raras o diferentes.... llegamos y se suponía que era un lunch en familia así que esperarábamos a que llegase la hermana de Teah de casa del padre donde habíamos estado, pero como no daban llegado todos empezaron a picar de la comida que había (por cierto comprada, mira que son vagos!) y al final eso fue la comida, no fue en familia o quizá para ellos sí lo sea. Mi concepto de comida familiar es sentados a la mesa, hablando y disfrutando de la comida. Para ellos la hora de comer es un simple mecanismo, se come porque es la hora, hay que comer y punto, no es nada cultural como en España. De todos modos, yo seguía ojiplática con la situación.
Cuando llegó la hermana por fin, de nuevo nos dimos los regalos (a la abuela le encantó la cesta de pastas que le compré) y después comimos el postre.
Luego de regreso a casa, dos horas de camino que se hicieron eternas y al llegar y para no variar me fui a casa de Anna a dormir. Es mi segunda casa aquí :)
Por cierto, de camino a casa de los abuelos vi un pueblo Amish, tengo muchas ganas de ir a visitar uno con calma. Lo único que vi de pasada fue a un señor amish labrando las tierras con caballos y arados de madera a la antigua usanza. Me parece increíble que todavía haya gente viviendo así en américa.
Casa de la abuela.
Los postres.
Y bueno... después de Noche Buena, Navidad y postnavidad en Virginia, ya se habían pasado la mitad de las fiestas y yo sin darme cuenta, sin asumir aún que estábamos en estas fechas tan señaladas y que no las había pasado en mi casa como hasta ahora.

Así que pronto llegó fin de año y de nuevo pensé en hacer como si de un día normal se tratara pero tampoco coló! De nuevo me levanté con la llorera y con la angustia de no pasar ese día con mi familia. Aunque finalmente... lo pasé bien!

Aquí no se celebra fin de año (cosa que no me cabe en la cabeza), no se suele hacer cena familiar y mucho menos comer las uvas como en España.
Así que mi plan fue cenar pizza en el suelo de casa de Anna y luego ir a downtown (centro de la ciudad) donde organizaban el "Accorn drop". Es parecido a la bajada de la bola de NY para recibir las campanadas pero a lo pobre.

Bueno, tengo que contar que a las 6:00, 12 pm en España, vi las campanadas por Skype con mi familia. Anna me apareció en la habitación con una copa de champán llena de zumo y doce cacahuetes (no podía ser otra cosa en este país del cacahuete) para que tomara las "uvas" con mi familia (que curriña es!) Estuvo genial, sin duda una manera muy especial y diferente de recibir las campanadas. Fue muy emocionante para mí, sobre todo el momento post-uvas de abrazos y brindis entre todos. Mi sobrino estaba eléctrico porque era la primera vez que iba a ver los petardos que se echan en Vigo después de las campanadas, está tan cambiado en solo 3 meses... Ay! cuánto lo echo de menos!!! (morriña modo ON).

Bueno... después de arreglarnos y toda la parafarnalia, llegamos al downtown y hacía un frío de muerte -2º y había muchísima gente por todos lados. Solo podíamos ver muy muy al fondo un escenario (con buena música) y la bellota gigante colgando de una grúa. Así que... qué es lo que suelen hacer unas españolas en estos casos?? colarse, efectivamente! Aprovechamos que pasaba una "conga" bailando para avanzar entre la multitud dejando a los lados muchas caras de desaprobación (pero en ningún momento nadie dijo nada, cosa que en España te montarían un pollo) y llegamos casi hasta el escenario y cuando vimos una buena ubicación allí nos quedamos.

Cuando llegamos...
y después de colarnos.


Después de colarnos.
Solo quedaban 20 minutos cuando nos asentamos y lo cierto es que se me pasó volando porque enseguida solo quedaban 2. Llevamos nuestras uvas, ilusas de nosotras, pero no pudimos tomárnoslas porque aquí en los últimos 10 segundos hacen como la cuenta atrás mientras la bellota va bajando e iban muy rápido como para comer una uva en cada segundo, así que comimos las que pudimos (en realidad en España nunca me las acabo tampoco). Cuando llegó a las 12 la bellota tocó el suelo y todo el mundo empezó a gritar Happy New Year y los fuegos artificiales empezaron a estallar con una música súper melancólica de fondo. Fue muy emocionante la verdad. Después de un buen rato de fuegos la gente empezó a irse y los bares empezaron a llenarse de gente. No hubiera estado mal seguir la fiesta allí con conciertos aunque hacía muchísimo frío.

Nos pusimos a buscar un bar y todos eran carísimos en plan 30$ solo por entrar así que seguimos buscando y encontramos unos por 5$. Había música en directo y no estaba mal y total... solo sería para una hora y media porque SÍ! también esa noche cerraban pronto los garitos.

Me lo pasé genial viendo el percal de nuestros alrededores, un día he de hacer un vídeo para que todos lo veáis. American Pie no es una película es la realidad americana! Y la manera de bailar de los americanos? eso merece una entrada aparte. Se ponen a bailar modo rozando cebolleta pero a un nivel exagerado y se pasan así horas y cada vez la cosa va a más. Puede haber en la pista de baile 8 parejas haciendo eso y a nadie le llama la atención más que a nosotras.

Después acompañé a Anna a fumar fuera y creo que pasé el mejor rato de toda la noche, como me reí. Conocimos a dos americanos y a pesar de que yo solo entablaba conversación para practicar mi inglés, ellos no hacían más que ofrecernos "american sex" que según ellos es el mejor del mundo. Yo empeñada en practicar preguntándoles qué estudiaban o trabajaban y sus respuestas siempre se dirigían a lo mismo, aquí son todos unos salidos aunque las americanas los equiparan bastante bien.
La noche se pasó muy rápido aunque agradecimos volver a casa pronto porque estábamos heladas y con dolor de pies.







Nunca creí que pasaría unas navidades tan lejos de mi familia y cuando pensé en que las iba a pasar aquí suponía que serían las mejores de mi vida, muy americanas y casi de película. Ahora, me doy cuenta que da igual donde pases las navidades, lo único que cuenta es que estés cerca de los tuyos para que realmente las disfrutes.

Aún así, me alegro muchísimo de haberlas vivido aquí y una de las cosas que me llevaré a España será intentar vivirlas como en USA porque me encantan estas fechas y ha sido una pasada ver lo fanáticos de la navidad que son los americanos.


...Un aventura más!


 

 

 

2 comentarios:

  1. ¡Hola! Feliz 2014! :) Una se siente bien después de haber superado las Navidades fuera de casa, aunque hayan sido un poco extrañas y nos hayamos sentido fuera de lugar en algún momento, te da como valentía de saber que después de éste puedes con todo xD jaja! Tu noche de fin de año tuvo pinta de ser bien divertida y curiosa! Saludos!

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  2. Feliz año para ti también!
    Pues sí... superado esto ya podemos con todo ;)

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